La conservación humana y ambiental depende de acciones concretas e interconectadas. A continuación, conoce aspectos de ayuda para lograr la sostenibilidad social.
Hoy es más importante que nunca tomar consciencia sobre las formas en que todos pueden aportar en la misión por alcanzar la sostenibilidad social.
Las crisis climática y sanitaria han traído a la luz algunas de las más grandes falencias que llevan a la desigualdad y al mal uso de los recursos medioambientales, dejando claro que es momento de actuar. Si quieres aprender más sobre qué es sostenibilidad social y cuáles son las claves para llegar a este valioso objetivo, sigue leyendo a continuación.
¿Qué es sostenibilidad social?
El concepto de sostenibilidad fue relacionado con el desarrollo social y ambiental en un escrito realizado para la ONU con el propósito de replantear las políticas globales de desarrollo económico, destacando el alto costo medioambiental causado por los avances.
Actualmente, la sostenibilidad se considera como la base para la conservación humana y ambiental, poniendo el foco en impulsar el avance económico y social, priorizando que las personas puedan tener un estilo de vida de calidad, sin poner en riesgo los recursos necesarios para que las futuras generaciones puedan tener las mismas expectativas. En este sentido, la sostenibilidad intenta asegurar que la relación entre la vida humana y el medio ambiente pueda sostenerse a largo plazo.
La ONU adoptó la sostenibilidad como una misión cuando estableció sus “Objetivos de Desarrollo Sostenible”, los cuales se presentan como una oportunidad para que las naciones trabajen en construir una mejor vida para todos, impulsando el necesario equilibrio entre sostenibilidad ambiental y social.
Claves para alcanzar la sostenibilidad social
1. Impulsar la justicia social
Gran parte de los objetivos establecidos por la Organización de las Naciones Unidas se enfocan en impulsar la justicia social, concentrándose en poner fin a la pobreza, eliminar el hambre en el mundo, garantizar el acceso a la salud y la educación, y alcanzar la igualdad de género.
La importancia de este objetivo recae en asegurar que todas las personas tengan igualdad de oportunidades y derechos, eliminando las situaciones de vulnerabilidad que muchas veces dificultan el progreso. Este es un punto clave en la misión por la sostenibilidad, ya que no puede existir una relación consciente y positiva con el medioambiente sin que las personas cuenten con una buena calidad de vida.
2. Tomar medidas por la crisis climática
El cambio climático tiene el potencial de afectar profundamente las vidas de las personas; se espera que esta crisis dificulte el acceso a necesidades básicas como el agua, comida y energía. Esto es particularmente preocupante considerando que el calentamiento global podría llevar a que millones de personas pasen a estar bajo la línea de la pobreza en el 2030.
En este sentido, es necesario tomar medidas cuanto antes para reducir la contaminación y así evitar que se profundice la vulnerabilidad, colocando el foco en conservar los recursos que mantienen a las personas sanas e impulsan el crecimiento económico.
3. Generar una economía sostenible
Ante el panorama actual, garantizar el progreso depende de encontrar alternativas a las estructuras económicas tradicionales y es en este contexto que ha surgido el concepto de economía verde, una práctica que comprende la relación entre el medioambiente y la economía, generando sistemas de producción que disminuyen las emisiones de carbono y optimizan la utilización de recursos.
Volver a imaginar la economía es primordial, especialmente considerando que la industria, como existe actualmente, es responsable por más de la mitad de las emisiones de contaminantes del mundo, por eso es necesario que los productores de bienes adopten nuevas prácticas para generar sus productos de forma más consciente y sostenible.
4. Consumir de manera responsable
Si bien la industria está produciendo la mayoría de las emisiones contaminantes, son las personas quienes consumen los bienes generados por esa contaminación. Por eso, es necesario que las personas dejen de consumir excesivamente para que los avances tecnológicos generados para lidiar con la crisis climática puedan dar abasto.
Así, es recomendable que se priorice la compra de artículos de primera necesidad, especialmente si es posible conseguirlos de comercios locales y en empaquetados que sean menos contaminantes que el plástico. Para todo lo demás, es preferible que se apoye a comercios adscritos a la economía verde y que se busquen alternativas de segunda mano.
5. Fomentar la innovación
El cambio necesario para lograr todos los puntos anteriores debe estar sustentado por nuevas maneras de mirar las estructuras económicas y sociales, por eso es primordial fomentar la innovación y el progreso tecnológico con el propósito de encontrar alternativas para optimizar el uso de recursos.
Este fomento depende de que exista un acceso garantizado a la educación y al apoyo económico necesario para que las personas que tienen nuevas ideas sobre cómo debe relacionarse la economía con el medio ambiente puedan desarrollar y ejecutar proyectos en beneficio de la sostenibilidad social.
Probablemente, puedes notar que todos estos objetivos están firmemente conectados; la innovación depende de la justicia social y las nuevas economías están ligadas a que exista un cambio en la manera de consumir. Este es un trabajo que depende de todos, por eso es necesario que tú también te comprometas a seguir aprendiendo y tomando acciones para impulsar la sostenibilidad ambiental y social.