Una de las mejores formas de trabajar como equipo es tener en conjunto metas de pareja en lo que respecta al dinero y así evitar encontrarse con desacuerdos en la toma de decisiones financieras.
Las relaciones de pareja sanas, son aquellas que tienen la confianza para que cada uno tome las mejores decisiones que pueden afectar a ambos en cualquier situación de la vida.
6 metas de pareja para tener una mejor salud financiera
Por ello, una de las mejores formas de asegurarse que los dos se dirijan hacia un punto en común en el futuro es tomar decisiones en conjunto. Se trata de crear una ruta juntos y que independiente de quién tome una decisión, ambos sigan un camino como pareja.
- Establecer objetivos conjuntos que se alineen con los personales. Inicia esta plática como si se tratara de una conversación en la que se ponen puntos de acuerdo para planear un viaje. Habla sobre lo que te gustaría en el futuro (una casa, un fondo de emergencia, una cuenta de ahorros para la jubilación, entre otros) y lo que quieres en tu vida diaria. No todas las metas financieras son a largo plazo; hay algunas en el corto (menos de un año) y en el mediano (de uno a cinco años). Recuerda preguntarle a tu pareja qué le gustaría lograr y si ambos quieren una propiedad, analicen el tamaño, la ubicación y un tiempo determinado para lograrlo.
- Elaborar un presupuesto. Con las metas establecidas, debes tener una idea sobre lo que ambos necesitan y cómo lograrlo. Por ello, es importante tener un presupuesto que vaya de acuerdo con esos planes. Enumera junto con tu pareja todas las necesidades y costos esenciales que tengan. Una vez que veas cuánto dinero les queda, hablen sobre la cantidad que quieren ahorrar y para qué fin en específico, con la idea de trabajar hacia los objetivos compartidos que tengan.
- Definir cuentas separadas o cuentas conjuntas. Una consideración importante a tener en cuenta en una relación es si se deben mantener o no cuentas bancarias separadas, así como tener cuentas conjuntas. Se trata de un tema que puede ser muy complicado sobre todo si existe una disparidad muy grande entre los ingresos de ambos.
- Hacer seguimiento del dinero gastado. Si es difícil dar seguimiento a los gastos individuales, los gastos en pareja suelen ser complicados. Sobre todo si ya cuentan con un presupuesto conjunto y no se crearon partidas para gastos discrecionales por persona o uno de los dos ha gastado más de lo que debían del dinero de ambos. Solo mediante conversaciones y análisis presupuestarios pueden lograr acuerdos para mantener una buena salud financiera como pareja.
- Fijar prioridades financieras. Las relaciones de pareja sanas tienen la comunicación como ingrediente clave y discutir las decisiones financieras no es un tema que se deba dejar de lado. La comunicación sobre las finanzas es un desafío porque las prioridades son tan únicas como las personas en una relación, por lo que cualquier estrategia de ahorro debe considerar las necesidades y aspiraciones de ambos para tener éxito.
- Ahorrar para el futuro. Las parejas que no tienen una buena disciplina y hacen un mal manejo de sus finanzas pueden no tener suficiente dinero para ahorrar. Una de las metas con tu pareja debe ser crear una partida del presupuesto para guardar una cantidad de dinero que sea equivalente a un porcentaje de los ingresos mensuales de cada uno. Ese ahorro puede tener como finalidad lograr un objetivo que sea establecido entre ambos.
Recuerda que las metas financieras en una relación son una responsabilidad compartida. Es ideal que puedas comunicarte con tu media naranja sobre los progresos en las metas de pareja que ambos hayan establecido, así como en los retrocesos.
Sean francos sobre sus expectativas y aquello que les gustaría cambiar del presupuesto y de los objetivos, considerando que es válido querer hacer ajustes en el camino. Dentro de las metas con tu pareja debe estar una comunicación regular y abierta que permita solucionar alguna situación que pueda surgir.