Conoce 6 desastres naturales que pueden ocurrir en México

Durante ciertas temporadas del año, México es más proclive a sufrir desastres naturales, conoce a continuación algunos de los desastres naturales más comunes:

1. Terremotos

Dada su particular posición geográfica, en una intersección donde varias placas tectónicas chocan constantemente, México es uno de los países que con mayor frecuencia sufren terremotos. Los más fuertes de su historia reciente han sido, respectivamente, los de 1957, 1985, y 2017.

Por supuesto, saber qué se debe hacer en caso de un terremoto no es sencillo, pero estas son algunas buenas prácticas en caso de un sismo:

• Ir directo a los puntos de reunión ya establecidos.
• Alejarse de objetos que puedan caerse, así como de ventanas.
• Evitar salir corriendo directo a las calles o donde transiten vehículos.
• Mantener la calma y alertar a seres queridos de lo que sucede.
• Organizar una mochila de emergencia con ropa, medicamentos, lámparas y baterías extra.
• Sacar a tu mascota contigo, con correa, si es posible.

Dado que los sismos son desastres naturales habituales, prepararte para saber qué se debe hacer en caso de un terremoto es una decisión sabia.

2. Inundaciones

Las tormentas en México generan inundaciones frecuentes tanto en comunidades pequeñas como en urbes. Han provocado daños recientes en Michoacán, Estado de México, Tabasco, Jalisco y Chihuahua, además de que una severa inundación azotó Hidalgo tras el desbordamiento del río Tula.

Las inundaciones pueden resultar catastróficas al mover de lugar los cimientos de una casa o saturar tierras de cultivo; por lo tanto, hay que prepararse buscando prevenirlas.

Crear canales, instalar costales que bloqueen el paso del agua, instalar compuertas en tu hogar o apoyar las propuestas gubernamentales en torno a la prevención, son todas medidas que serán de ayuda. 

3. Deslaves

Es un efecto colateral de tormentas e inundaciones. Los deslaves podrían arrastrar poblaciones a su paso y bloquear caminos vitales para la interconexión entre estados, según su intensidad.

Justamente cuando hay lluvias torrenciales, el riesgo se incrementa, al grado de que el Servicio Meteorológico Nacional advirtió del peligro de deslaves en los estados de Veracruz, Oaxaca y Chiapas.

4. Heladas

Otro de los desastres naturales comunes y que más afectan a las localidades de bajos recursos y a los campos de cultivo, son las heladas.

Aunque no causen daños tan estrepitosos como un terremoto o huracán, los perjuicios materiales son considerables y los agricultores deben sembrar con las heladas en mente, siempre buscando el modo de minimizar sus efectos.

5. Sequías e incendios

Las sequías ocurren en otros momentos del año, aunque resultan igual de dañinas durante un periodo extenso. Ahora bien, la escasez de un recurso básico como el agua no solamente afecta el organismo de las personas, sino a otros procesos donde este elemento es crucial, como en el riego de cultivos y al apagar incendios.

Con respecto a los incendios, estos suelen acontecer tras una temporada extensa de sequía, pues la madera y el material vegetal son más inflamables cuando están secos. Estos desastres naturales tienen consecuencias severas para los ecosistemas y áreas verdes del país, así como para las viviendas que se encuentran cercanas a las zonas en que ocurren.

6. Huracanes

Anualmente, de junio o noviembre, llegan los huracanes a costas y mares nacionales. Son tan frecuentes que durante esta época pueden acontecer varios huracanes a lo largo de la costa del Pacífico, en el Golfo y en el Caribe.

Cada huracán, claro está, tendrá diferentes intensidades. Serán separados según sus categorías, la 5 siendo la más potente y peligrosa. En caso de que tu casa esté en la costa o directamente en la playa, y esta puede ser afectada directamente por un huracán, asegurar tu hogar mediante un seguro resultará indispensable.

Durante el año pasado, las tormentas causaron millonarios daños y pérdidas. Esto junto con los otros peligros que se han revisado, te ayudarán a comprender la magnitud de los efectos de estos imprevistos, que pueden colocar en jaque tu patrimonio y finanzas.

Por eso, optar por proteger tu hogar con un seguro y las cosas de su interior es una estrategia inteligente; sobre todo si vives en áreas proclives a estos eventos.