Seguro has oído hablar de este fenómeno económico, ¿pero cómo afecta tu vida y cuáles son las causas de la inflación?
¿Qué es la inflación?
Este concepto indica que, en general, el precio que tienen las cosas aumentan según pasa el tiempo, dando como resultado que el mismo dinero ya no es suficiente para comprar un determinado producto o servicio.
Es decir, que tu dinero pierde poco a poco su valor y, por ende, disminuye tu poder adquisitivo. La inflación se expresa en un porcentaje que señala cuánto han aumentado los precios, llamado Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC).
Un ejemplo de qué es la inflación, es el importante aumento de precios que han tenido en el último año, productos como los huevos, el aceite, las tortillas y la carne.
Las consecuencias de la inflación son sencillas de percibir en este aspecto, aunque las razones de que exista puede ser un poco más complicada de entender.
¿Cuáles son las causas de la inflación?
Demasiado dinero en circulación
Cuando hay mucho dinero en manos de los ciudadanos, es posible que se comience a gastar más, generando una mayor demanda de bienes y servicios.
Y lo es, pero si el país no posee la capacidad productiva para cubrir esa demanda, suben los precios y también aumenta la escasez de algunos productos, resultando en que se genera inflación.
Más demanda contra menos oferta
En cambio, si un determinado producto comienza a tener una mayor demanda y la oferta no es suficiente para satisfacer esa necesidad que se genera, es muy probable que se produzca un aumento de su valor.
En caso de que lo anterior sea algo que ocurra con una gran cantidad de productos, entonces será un factor a tener en cuenta en el aumento de la inflación.
Aumento en el valor de las materias primas
Cuando a nivel global se encarecen las principales materias primas, los procesos productivos de todo tipo de bienes se pueden ver muy afectados.
Lo anterior significará que el valor final de un determinado producto será mayor, y por lo mismo, el costo de venta que tendrá para el consumidor también aumentará.
Como ves, al hablar de cuáles son las causas de la inflación, es inevitable mencionar la influencia de varios factores que pueden alterar el valor de muchos productos y servicios. No obstante, hay consejos que te ayudarán a controlar o evitar que tus ahorros se vean afectados por la inflación.
Prácticas financieras para resistir la inflación
En el presente año, los precios en general han aumentado mucho en relación con los años previos. Sin embargo, puedes poner en marcha estos consejos de salud financiera con tal de no sufrir tantas afectaciones:
- Utiliza de buena forma tus tarjetas de crédito. Es responsable pagar el mínimo de tu tarjeta de crédito para crear un buen historial crediticio, pero si el precio de las cosas se incrementa, es mejor que tengas fondos para gestionar esos gastos del mes. Intenta pagar el total de tu línea de crédito y así evitar cargos adicionales por su uso.
- Evita adquirir nuevas deudas. Adicionalmente, no incurras en deudas o compromisos financieros que afecten tu economía personal. Haz compras inteligentes con el dinero que ya tienes y no te comprometas con pagos de cosas innecesarias.
- Compara antes de compras. En momentos en que las cosas suben de precio, tiene especial importancia el comparar productos y la calidad de los mismos antes de tomar una decisión de compra. Evalúa en qué tienda te conviene comprar más y si puedes ahorrar al comprar en mayor cantidad.
- Opta por créditos de tasa fija. Si es necesario financiar algo como un coche o una casa, pero quieres reducir las consecuencias de la inflación, entonces procura elegir una tasa de interés fija, cuyo valor monetario no cambie mes con mes. De esta forma, pagarás las mismas mensualidades, y podrás calcular mejor tus gastos.
Al conocer qué es la inflación, podrás seguir cuidando de tu salud financiera y alcanzar tus metas de vida, prestando atención a tus tendencias de consumo y a las fluctuaciones de la economía.
Sobre todo cuando veas que la inflación es alta, puede ser un buen momento para ahorrar y comenzar a invertir tu dinero para tener la posibilidad de obtener rendimientos que te permitan enfrentar de mejor forma los efectos de la inflación.