Solicitar un crédito hipotecario para comprar la casa de tus sueños es una de las decisiones más importantes en tu vida. Cuando solicitas un crédito hipotecario al banco, te comprometes a devolverle la suma que te prestó en un periodo determinado como. Pero ¿has notado que el pago total es más alto que la cantidad que el banco te presto?
Esto es porque se te está cobrando un interés, esto es, la suma que el banco o una entidad financiera te cobra por haberte prestado el dinero necesario tener la casa que tanto anhelas. La tasa de interés de un crédito hipotecario se expresa en un porcentaje y su valor depende del banco o de la institución financiera y del tipo de crédito que hayas solicitado.
Cuando estés por solicitar un crédito hipotecario, revisa el tipo de tasa de interés que el banco te cobrará, así como su monto. Si no sabes qué son, acá podrás revisar cómo funcionan para hacer rendir mejor tu dinero.
¿Cómo funciona la tasa de interés de un crédito hipotecario?
Lo primero que debes tener en claro es que hay dos tipos de tasas de interés, la fija y la variable.
La fija te asegura que pagarás el mismo porcentaje durante toda la vida de tu crédito, siempre y cuando no te retrases en los pagos. Mientras que la tasa variable, funciona de acuerdo con los intereses que sean determinados por el mercado y estos cambian de mes a mes.
Considera que mientras más tiempo dure el plazo del crédito que solicitaste, pagarás más intereses. Por el contrario, con un plazo corto rendirá mejor tu dinero pues cada mes liquidarás más del monto original que te prestó el banco y no tanto en intereses. Por lo tanto, concluirás antes el pago de tu crédito.
¿Cuándo tengo que pagar los intereses?
Los intereses de tu crédito hipotecario no son un pago extraordinario que tienes que programar, sino que se cobran en cada mensualidad que debes liquidar.
Por eso, cuando la tasa de interés de crédito hipotecario es fija, debes ser puntual en tus pagos. Solo así evitarás que te cobren intereses por pagos tardíos y que cambie el tipo de interés.
Cuando estés por contratar un crédito hipotecario, recuerda que el plazo más largo no siempre resulta ser el más conveniente.
Ahora que conoces cómo funciona la tasa de interés de un crédito hipotecario, escoge un plazo que se ajuste a tu capacidad de pago mensual y maximiza el rendimiento de tu dinero.