Registro Federal de Contribuyentes

El RFC personal es una clave de 13 caracteres conformada por letras y números, utilizada por el Gobierno de México para identificar a las personas físicas y morales que desarrollan alguna actividad económica en el país.

Funciona para que el SAT (Servicio de Administración Tributaria) tenga el conocimiento de la actividad económica realizada por cada contribuyente.

El RFC, o Registro Federal de Contribuyentes, es un identificador único que se utiliza en México para llevar un registro de las obligaciones fiscales de las personas físicas. 

Esta identificación es esencial para llevar a cabo una serie de trámites, como la presentación de declaraciones, la emisión de facturas, realizar transacciones financieras y adquirir productos bancarios como tarjetas de crédito. 

Para las personas físicas, el RFC generalmente se compone de las iniciales del nombre y apellidos, la fecha de nacimiento y algunos dígitos adicionales.

Para obtener tu RFC como persona física, debes realizar un registro ante el SAT. El proceso generalmente implica dar información personal y fiscal, como:

• Nombre.
• Apellidos.
• Fecha de nacimiento.
• Domicilio fiscal. 

Una vez registrado, se te asignará un RFC único que deberás utilizar en todas tus transacciones fiscales.

Si te has preguntado “¿Cómo tramitar mi RFC?” primero investiga si ya estás registrado en el RFC selecciona la opción de “persona física”, a continuación ingresa tu CURP, y revisa le renglón de “estatus” ahí aparecerá si estás registrado o no. 

Sin embargo, si todavía no cuentas con el Ingresa al sitio del SAT:

1. Da clic en “Trámites del RFC”.
2. Selecciona “Obtén tu RFC con la Clave Única de Registro de Población”.
3. Ingresa tu CURP y el código captcha. Automáticamente, saldrán todos tus datos con el mensaje “registrado en el padrón de contribuyentes”. Confirma tus datos y completa los que falten.
4. Da clic en continuar y se desplegará tu RFC con homoclave.

Es importante entender que el RFC funciona para cumplir con las obligaciones fiscales en México y realizar diversas actividades económicas. Asimismo, otras de las razones por las que es necesario tramitarlo son:

1. Presentación de declaraciones fiscales: Si eres una persona física con actividades económicas, como trabajador independiente o empresario, debes presentar declaraciones fiscales periódicas. El RFC te permite cumplir con esta obligación de manera adecuada y oportuna.
2. Emisión de facturas: Para emitir facturas válidas y legales por tus servicios o productos, es necesario contar con un RFC. Las facturas son documentos fundamentales en transacciones comerciales y deben incluir tu identificación fiscal.
3. Apertura de cuentas bancarias: La mayoría de los bancos en México requieren que los clientes proporcionen su RFC personal al abrir una cuenta bancaria. Esto se hace para cumplir con regulaciones de prevención de lavado de dinero y para registrar adecuadamente las transacciones financieras.
4. Compras y ventas de bienes raíces: Cuando compras o vendes una propiedad, el RFC es necesario para cumplir con los requisitos fiscales y realizar los pagos correspondientes, como el Impuesto Sobre la Renta (ISR).
5. Trámites gubernamentales: El RFC también es necesario para llevar a cabo diversos trámites gubernamentales, como obtener una licencia comercial o registrarse como empleador.

Sabes cómo sacar el RFC de una persona y llevar a cabo el trámite te permite cumplir con tus obligaciones como ciudadano. Además, es necesario contar con un RFC para solicitar una tarjeta de crédito BBVA, ya que esta identificación es requerida por las instituciones financieras. 

Recuerda que al pagar tus impuestos es importante tener un registro de tus ingresos y gastos, es por ello que, te recomendamos tramitar una tarjeta de crédito de BBVA. Algunos de los beneficios de la tarjeta de crédito de BBVA incluye: 

• Monitorear fácilmente tus ingresos y gastos mediante la App BBVA.
• Cuentas con puntos BBVA que pueden incrementar en cada compra.
• Contratación 100% en línea.
• 3 meses sin intereses en todas tus compras los primeros 30 días.

Recuerda cumplir con tus obligaciones financieras, trámites del SAT y mantenerte al tanto de tus finanzas mediante la ayuda de BBVA.