¿Recuerdas cómo aprendiste acerca del dinero cuando eras niño? Probablemente tus padres te dieron algo de efectivo para que llevaras a cabo una operación sencilla, como comprar en una pequeña tienda, y una vez que la hiciste, te permitieron quedarte con el cambio. En la actualidad, las finanzas para niños son muy diferentes a cómo eran décadas atrás.
A medida que la tecnología inunda la vida moderna, tanto los pagos como la administración del dinero han cambiado bastante. A menudo las transacciones no son tangibles y el efectivo se está volviendo menos relevante en comparación con el uso de las plataformas digitales.
¿Cómo enseñar finanzas para niños de buena manera?
En una época como la actual, una buena parte de los niños tienen acceso a un teléfono móvil con conexión a internet en sus casas. Usualmente se trata del dispositivo de los padres, con el cual pueden ingresar a las tiendas de aplicaciones y hacer compras sin que te des cuenta. Aprovecha el momento en que te enteras sobre este tipo de acciones imprudentes por parte de tus hijos, para enseñarles sobre el valor del dinero y cómo administrarlo correctamente.
Sin duda, es responsabilidad de los padres enseñar el concepto de dinero a sus hijos, así como las posibilidades que entrega y también las responsabilidades que conlleva.
Revisa algunos motivos para enseñarles educación financiera desde temprano a tus hijos:
- Desarrollar buenos hábitos financieros. Establecer una relación positiva con el dinero no sucederá de la noche a la mañana. Los niños deben tomar pequeños pasos para desarrollar una comprensión sana de lo que implica la administración responsable del efectivo. De esa manera, podrán establecer buenos hábitos financieros para el futuro.
- Formar una conciencia financiera. Las interacciones financieras en persona, son vitales para crear conciencia sobre el dinero en los niños. Cuando vayas a comprar al súper o una tienda, llévalos contigo (con las medidas sanitarias correspondientes) para que puedan aprender cómo se hace una transacción y la importancia que tiene cuidar el presupuesto al elegir los productos más convenientes.
- Establecer y alcanzar metas. A medida que los niños crecen, puedes ayudarlos a establecer algunas metas financieras pequeñas, como por ejemplo, juntar dinero para comprarse esa figura de acción que tanto quieren. Procura estar siempre presente para asistirlos en cumplir esos objetivos.
Al darles educación financiera de manera regular, los niños comprenderán que deben prestar mucha atención a lo que pasa con su dinero. No se trata de crearles una obsesión con el efectivo, sino que puedan desarrollar buenos hábitos para que más adelante puedan tomar sus propias decisiones económicas.