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La Reforma de Pensiones

7 ago. 2020

Rodrigo Barajas

Recientemente el poder ejecutivo, así como la Secretaría de Hacienda y representantes del sector empresarial (CCE) y de las AFORES, presentó una iniciativa de Reforma al Sistema de Pensiones de México.

En general, la reforma considera los siguientes cambios: un incremento paulatino en los próximos ocho años en las aportaciones por parte de las empresas a las cuotas de ahorro para el retiro de los trabajadores de 5.15% a 13.87%, la contribución por parte del gobierno federal se redirecciona en beneficio de los trabajadores con ingresos menores (hasta 4 UMAS). Por su parte, las afores acuerdan ajustar sus comisiones a estándares internacionales, reducción de semanas de cotización a 750 con un crecimiento gradual posterior a 1,000 (actualmente el requisito son 1,250 semanas), y el aumento en el importe de la Pensión Mínima Garantizada, hoy de 3,289 pesos para alcanzar un promedio de 4,345 pesos, en función de la edad, salario y semanas cotizadas. (Proyección con el valor de la UMA actual).

El tema central de la Reforma, es proveer de recursos y condiciones que mejoren la posibilidad de que los trabajadores cuenten con una pensión mayor a la que se tiene acceso con las reglas actuales. 

Con esta reforma se busca incrementar la tasa de reemplazo al 40% del ingreso promedio; esta iniciativa está bien encaminada, siendo susceptible de más modificaciones ya que hoy no recoge aspectos de género, trabajadores en la informalidad o independientes, ampliar la deducibilidad a los planes de pensiones privados, entre otros aspectos a mejorar. 

Mantienen relevancia otros temas primordiales, como el ahorro voluntario y los planes privados de pensiones. La aportación del trabajador no se modifica en esta reforma, entonces el panorama sigue siendo retador pues los ingresos que un jubilado habrá de recibir seguirán siendo limitados.

La generación Afore, tiene frente así un reto importante de cara a su futuro, el ahorro voluntario sigue siendo muy pobre, de acuerdo con datos del gobierno (PENSIONISSSTE, 14 de marzo 2019) en el 2018 solo el 10% de los trabajadores hacen ahorro adicional; es mucho menor el número de personas con un Plan Personal de Retiro, y sólo unos cuantos los que trabajan en alguna empresa en la que tengan un Plan de Pensiones privado. 

Si bien los esfuerzos por parte del gobierno y de las empresas son muy importantes, toca a cada quien hacer lo propio y tomar conciencia de la necesidad de ver por su futuro económico. Las alternativas que existen actualmente permiten deducir impuestos por el ahorro voluntario. 

Actualmente los bancos, aseguradoras y las mismas afores asesoran y diseñan productos y soluciones que ayudan a conseguir las metas propuestas, haciendo descuentos programados a la cuenta bancaria, esquemas que consideran seguros adicionales, productos de inversión como fondos de inversión que permiten inversiones pequeñas con diferentes perfiles de riesgo para buscar el que más se acomode a las necesidades de cada uno.

El final del ciclo laboral que cada persona pretenda dependerá entre otros factores, de la previsión a futuro que decida emprender; es claro que el reto es complejo, pero las alternativas existen y nunca es tarde para comenzar a pensar cómo se quiere vivir una vez que llegue el momento del retiro.

Rodrigo Barajas
VP - I&C Sales
BBVA Asset Management
rodrigo.barajas@bbva.com 

Esta es una colaboración para la columna "Finanzas para Todos" del periódico El Economista. Consulta también la nota aquí.